martes, 7 de febrero de 2012

Signos.

En el interior una navaja  habla de cerca
con los ojos que lo perseguirán
en la madrugada. En ruedo

como la mano que soba las tetas desnudas
de la luna y conquistan lo anaranjado.       Bajo el agua
el payador no interrumpe su canto,
ahora las mariposas persiguen el fuego
que escapa del refugio.

Se arrancarán los ojos, como las sombras
de las nubes
se pintarán la boca, como el rastro
de un rio seco
se sentarán        y esperarán, como el amante
exhausto cuenta el nacimiento
–o el suicidio- de las gotas.
                                                                          Ger Kleiner.





*"Polifonia Audaz", Dunken, pág 48; 2012